Terminado el primer zortziko, la primera pareja hace un nuevo puente antes de comenzar el segundo zortziko. Este se caracteriza porque el o la «dantzagaia», en vez de bailar hacia delante, lo hace hacia atrás, mirando a su pareja.
Mientras se baila el zortziko, la última pareja sale del grupo y sacar a la plaza a bailar a una persona elegida previamente. Esto se lleva a cabo al finalizar el zortziko: los dos dantzaris hacen pasar al invitado por delante del dantzagai y lo sitúan trás de él. Con esto termina el segundo Zortziko.