El Baile de la Era es una suite de danzas. Estas reciben diversos nombres y son bailadas una detrás de otra en el mismo baile, como si de una sola danza se tratara. Las danzas reciben estos nombres:
Pasacalles
Cadena
Fandango
Vals
Jota Vieja
irakurri gehiago
El Baile de la Era es una suite de danzas. Estas reciben diversos nombres y son bailadas una detrás de otra en el mismo baile, como si de una sola danza se tratara. Las danzas reciben estos nombres:
Pasacalles
Cadena
Fandango
Vals
Jota Vieja
Boleras
Pasacalles o Corrida final
En el contexto de Lizarra-Estella sólo una de ellas es bailada separadamente de las otras: la Jota Vieja. Esto ocurre el primer día de las fiestas de agosto
Al igual que otras manifestaciones coreográficas, el Baile de la Era tiene una historia de pérdida y recuperación. No sabemos con exactitud en qué consistía el Baile de la Era con anterioridad a 1903, aunque la composición de lo presentado en esta fecha puede ser una estilización de las danzas en boga en la época, en los lugares donde se celebraban los bailes: las eras.
Los orígenes de la versión actual del Baile de la Era se encuentran en la danza bailada con...irakurri gehiago
Al igual que otras manifestaciones coreográficas, el Baile de la Era tiene una historia de pérdida y recuperación. No sabemos con exactitud en qué consistía el Baile de la Era con anterioridad a 1903, aunque la composición de lo presentado en esta fecha puede ser una estilización de las danzas en boga en la época, en los lugares donde se celebraban los bailes: las eras.
Los orígenes de la versión actual del Baile de la Era se encuentran en la danza bailada con motivo de la visita de Alfonso XIII a Lizarra-Estella. Era el día 30 de agosto de 1903 , al anochecer:
Después de los fuegos tuvo lugar el llamado baile de las eras.
Las diferentes partes, cadena, preparación, fandango, boleras, y corrida fueron muy aplaudidos (DN, 31/08/1903, p. 3)
Previa a la publicación de la reseña periodística es la publicación, por parte de una imprenta estellesa, de una hoja suelta en la que se da cuenta de datos que, seguramente, utilizaría posteriormente el periodista:
El antiguo baile de la gaita, escrito en música por primera vez por DON JULIÁN ROMANO, gaitero que fué de Estella, y conservado por su hijo y sucesor D. Demetrio Romano, que ha dirigido su ensayo con motivo de la venida de S.M. y AA. RR. á Estella en el mes de Agosto de 1903, para el obsequio que, con carácter particular, se proponen tributar varios jóvenes estelleses á sus Augustos huéspedes, bailándolo á su presencia (Hermoso de Mendoza, 2011).
Las parejas que bailaron esa noche, recibieron un «donativo» de 250 pesetas del rey (DN, 1/09/1903, p. 2).
Queda claro que es Julián Romano quien pasa a partituras el «baile de la gaita» y que es su hijo Demetrio quien, con la ayuda de Modesto Iribas (Doñabeitia, 2017, 17), recupera ese baile al que ahora se denomina «baile de las eras». Pero, a continuación de esa aclaración sobre el origen de la danza, la hoja impresa trae la primera descripción de lo que será el Baile de la Era de Estella:
Consta de varios número ó figuras, cada cual con música propia.
NÚMERO 1º —Cadena— El hombre invita al baile á la mujer que elige ofreciéndole el pañuelo que sostiene por una punta dejándolo colgar; si la mujer acepta, toma en señal de ello la otra punta y queda formada la pareja; simultáneamente y del mismo modo se forman las demás.
Cogidos todos de los pañuelos en línea ó cadena recorren bailando el lugar describiendo círculo; y, a las notas lentas de la gaita, la primera pareja levanta en alto su pañuelo por debajo del que pasan las demás, haciéndolo después en sentido inverso por debajo del que sostiene en alto la última pareja.
La segunda parte de este número es una repetición á distinto aire, (que es de los más genuinos de la gaita,) sin pasar bajo el pañuelo.
2º—Jota— Està en uso; y para abreviar se suprime.
3º—Fandango— Consta de dos partes: la primera es una especie de jota muy movida, que, á la vez que las parejas la bailan como tal, ván transladándose de sitio formando arco: la segunda es una figura peculiar y muy delicada, que corresponde á la copla: la mujer descansa el brazo en el hombro de su compañero, y sin otro apoyo termina la figura.
4º—Boleras— Las primeras notas son de preparación á esta figura, en que las parejas se forman en dos filas paralelas, la una de hombres y la otra de mujeres. Como que este primer compás era de espera, limitándose las parejas á dar una rápida vuelta á su terminación, era tradicional proferir la frase «para el gaitero.»
5º—Corrida— El hombre coje con el brazo derecho la cintura de la mujer, que apoya la mano en el hombro de aquel, y con las otras manos enlazadas marchan corriendo. En el baile popular este número era muy animado, no solo por su natural viveza, sino por las risas y exclamaciones de las parejas á que el público tenía que abrir paso para no sufrir el choque de las mismas. Al final se aceleran los compases que por su rapidez no podrían continuar, y marcan la conclusión.
Tras la actuación ante los monarcas españoles, el Baile de la Era vuelve a conocer un nuevo declive. Para 1905 ya no se baila, tal y como se denuncia en el Diario de Navarra:
En la misma plaza [de los Fueros] ha habido baile al son de la gaita todas las noches de nueve á once. Y a propósito de bailes ¿por qué no se hace algo por restaurar los antiguos bailes de Estella? Aquel trenzado y cadeneta cuyos airosos movimientos recuerdan al aurresku ¿no son preferibles a estos achulapados e indecorosos bailes que ahora se usan? Cuando el Rey vino a visitamos le agradaron mucho nuestras danzas castizas, tradicionales, pero han desaparecido tan por completo, que es necesario enseñárselas a la actual juventud y para eso el Ayuntamiento debería establecer como un número de fiestas un concurso de parejas bailadoras con premios para los que más se lucieran (DN, 10/08/1905, p. 1)
No sabemos hasta dónde llega el conocimiento del estado de vitalidad de la tradición por parte del Corresponsal de dicho periódico. Para la siguiente recuperación se ha de esperar hasta 1933. En enero de ese año se crea el Comité Pro Baile de la Era (Doñabeitia, 2017, 20), con elementos nacionalistas estelleses (Fortunato Agirre, Peio Irujo Ollo) y la familia de gaiteros Elizaga (los hermanos Moisés, Fermín y Edilberto). El proceso de recuperación contará con la ayuda de participantes en el acto de 1903. La adscripción política de los promotores marcará también a la danza. Así, los supervivientes al golpe militar de 1936
recuerdan que cuando por primera vez lo bailaron en la plaza de los Fueros, el Nuevo Casino Español, centro de la burguesía estellesa más anti-vasca, cerró sus balcones porque les pareció un baile políticamente inaceptable por su vinculación al nacionalismo vasco (Hermoso de Mendoza, 2011).
Por ello, la represión contra el nacionalismo vasco ejercida tras el golpe militar de 1936, detiene la recuperación del Baile de la Era. Este es asociado por los golpistas con el nacionalismo vasco y los dantzaris son obligados a entregar sus trajes en la Comandancia militar (Doñabeitia, 2017).
Tras la guerra, el Baile de la Era tiene una presencia irregular. La Sección Femenina de la Falange Española lo baila de manera esporádica (Doñabeitia, 2017, 31). También el ayuntamiento de Estella llegó a organizar un grupo informal que fue tomando fuerza, mientras el de Falange desaparecía. Finalmente, en 1947, el Ayuntamiento estellés crea el Cuadro Municipal del Baile de la Era con la finalidad de “perpetuar dicho Baile de la Era” (Doñabeitia, 2017, 33). Este grupo se disolvió en 1949. La corporación estellesa, sin embargo, no cejó en su empeño de que existiera un grupo que asumiera los objetivos del Cuadro Municipal. Fue Francisco Beruete quien llevó a cabo la formación de un nuevo grupo de danzas, con la ayuda de antiguos dantzaris del Cuadro Municipal y de Elizaga (Doñabeitia, 2017, 38). Esto garantizó la permanencia del Baile de la Era a partir de entonces.
A nivel coreográfico el Baile de la Era también ha evolucionado con el tiempo. En 1903 se construye el Baile de la Era sobre la estructura del ingurutxo, al que se le añaden otras danzas recogidas por Julián Romano y enseñadas por Demetrio Romano y Modesto Iribas (Ibai-Ega.com). Ya hemos visto que en el programa de 1903 eran cinco las danzas descritas: Cadena, Jota, Fandango, Boleras y Corrida. De ellas, la Jota no se llegó a bailar porque estaba «en uso». De lo que podemos deducir que el resto no lo estaban, o no lo estaban en la misma medida. El P. Olazaran (1929) ya hablará de «siete números»: el primero lo da sin nombre («1») y el segundo también, «2» («agilísimo tres por ocho»); el tercero es «una graciosísima jota vieja», el cuarto es un vals, el quinto es «un fandango andaluz», el sexto son «las boleras» y el séptimo «una especie de corre-calle, un seis por ocho brincador». Bajo la dirección de F. Beruete, el Baile de la Era conocerá su versión definitiva, que resulta de su adaptación al escenario y que podemos apreciar en el programa festivo del día del homenaje al auroro, de 1954: Correcalle, Cadena, Fandango, Vals, Jota Vieja, Boleras y Corrido final (Taller de Danza popular de Tierra Estella, 2021).
La coreografía interna de las danzas también fue estandarizándose. Ya en 1933, Hilario Olazaran se había dirigido al Comité de recuperación para que los dantzaris unificaran la coreografía, comenzando con los mismos pies, girando en el mismo sentido, etc. Esto no se produjo hasta 1950 (Doñabeitia, 2017, 21).
El Baile de la Era, como ya se ha dicho, se popularizó por toda Euskal Herria, siendo danza habitual en las fiestas de las principales localidades de Navarra y adquiriendo rango de «tradicional». Ya en 1943 lo aprendió el grupo Oberena, de Pamplona, y para 1951 el Grupo de Danzas del Ayuntamiento de Pamplona (Taller de Danza popular de Tierra Estella, 2021). Para entonces ya era un baile popular en la capital.
Sin embargo, las versiones que se bailaban eran diferentes dependiendo de la fuente utilizada, así como del momento del aprendizaje en el contexto de la tradición estellesa. En 1978, Euskal Dantzarien Biltzarra (Federación de Dantzaris vascos) organiza el primer Dantzari Eguna al sur de la muga tras la muerte de Franco. El Baile de la Era cierra el festival celebrado en una Plaza de Toros de Pamplona llena y con todos los grupos de danza bailándola en el ruedo. Para conseguir tal propósito, se realizaron ensayos con todos los grupos participantes de manera que la versión bailada ese Dantzari Eguna es la que ese año se bailaba en Estella. La Federación decidió dar carácter de danza nacional al Baile de la Era y comenzó, así, su expansión por toda la geografía de Euskal Herria.
1947. Baile de la Era de Estella-Lizarra. "El joyel de España". F.: Dantzan.eus
2011. Baile de la Era de Estella-Lizarra. Día de los ex-dantzaris. F.: 55 subtitulos CC
El Baile de la Era se baila con “ropa de calle”, esto es, con ninguna especial. Dado que el tiempo más habitual en el que es bailado son las fiestas patronales o populares, es el traje de fiestas el más frecuente. Allá donde el traje de fiestas es blanco, este será el utilizado.
Por otro lado, los grupos de danza estelleses han utilizado con el tiempo diversas indumentarias. Si bien en la primera fotografía de 1903 no se aprecia una vestimenta especial, sí que son a...irakurri gehiago
El Baile de la Era se baila con “ropa de calle”, esto es, con ninguna especial. Dado que el tiempo más habitual en el que es bailado son las fiestas patronales o populares, es el traje de fiestas el más frecuente. Allá donde el traje de fiestas es blanco, este será el utilizado.
Por otro lado, los grupos de danza estelleses han utilizado con el tiempo diversas indumentarias. Si bien en la primera fotografía de 1903 no se aprecia una vestimenta especial, sí que son apreciables algunas características de la indumentaria festiva, como son los grandes pañuelos al cuello que llevan los hombres. Sin embargo, en el grupo que en 1933 recupera el Baile de la Era ya se aprecia una cierta uniformidad, que es total en los hombres: camisa y pantalón blancos, faja y pañuelos rojos y alpargatas blancas trenzadas. En las chicas la uniformidad es de estilo, que no de colores: faldas hasta por encima de los tobillos adornada con una franja de otro color en su borde inferior, camisa blanca y pañuelo a juego con la falda:
Modesta Salsamendi, danzari de aquella época, recuerda que llevaban faldas de color rojo o azul con una franja blanca y pañuelo de tres puntas a juego con la falda. A esto hay que añadir una blusa y medias, ambas en color blanco. Todos los danzaris calzaban alpargatas blancas con cintas rojas, exceptuando las chicas que llevaban falda azul, que su calzado tenía cintas del mismo color (Doñabeitia, 2017, 99).
Hermoso de Mendoza (2011) hablará de faldas «rojas o verdes».
A partir de ahí, será el traje de las chicas el que vaya sufriendo transformaciones. Para realizar un seguimiento de la indumentaria femenina en el contexto de los grupos de danza de Estella, se puede consultar Doñabeitia (2017)
Tal y como se ha comentado más arriba, las primeras transcripciones desde la tradición oral a la escrita proceden de Demetrio Romano, que las recoge de su padre, el reconocido gaitero Julián Romano. Más adelante, con motivo de los Juegos Florales y Certamen celebrados por acuerdo del ayuntamiento pamplonés en 1928, se constituyó un premio de 250 pesetas para el Certamen de Música:
Colección de piezas bailables para chistu y gaita, que armonicen con los bailes llamados de la era, inguruchu, etc. (Doñabeitia, 2017)
Los gaiteros Elizaga se presentaron al certamen con su partitura del Baile de la Era y fueron premiados. El año siguiente, 1929, es el P. Hilario Olazaran quien lleva a partitura para piano el Baile. Los hermanos Elizaga serán los sucesores de los Romano y, a partir de 1947, los Montero y los Pérez de Lazarraga fueron los contratados por el ayuntamiento estellés.
Respecto a la música del Baile de la Era, los Gaiteros de Pamplona (1976) establecen la existencia de tres versiones para ese año: la presentada por Elizaga al certamen de 1928, la versión perdida de Julián Romano y la que interpreta el grupo Larraitza. Pero puntualizan que esa versión perdida de Romano es, seguramente, la que recoge Olazaran en su publicación, pues él mismo comenta:
para esta publicación me he servido de dos versiones, que concuerdan casi en absoluto y se completan mutuamente. La que me prestó generosamente la señora viuda de Julián Romano, y la que los hermanos Elizaga presentaron al concurso de música popular navarra y que fue premiada por el Ayuntamiento de Pamplona, en 1927.
Son melodías de gaita, que sin cambiar una nota, salvo las pequeñas adiciones que a modo de ritmo de tambor pongo antes de cada número… (Olazaran, 1929)
Olazaran hace dos acotaciones más que llevan a esa conclusión:
El número 4 es un vals, cuya relativa modernidad no se puede poner en duda. No consta en la versión de los Elizaga; sí, en la de J. Romano (Olazaran,1929)
La melodía que publico [de la última danza] es de J. Romano; los Elizaga ponían otra más universalmente conocida (Ibídem)
Los Gaiteros de Pamplona entienden que las partituras de Elizaga y Olazaran-Romano no contienen «contradicción alguna» (Gaiteros de Pamplona, 1976, p. 175) pese a las variaciones y se decantan por publicar la partitura de la música que en ese momento se baila en Estella, la de Elizaga. En dicha versión «se han suprimido buena parte de las repeticiones», que los dantzaris ya no ejecutan.
La velocidad en la ejecución de las melodías también ha variado. Ahora se tocan más rápido que antiguamente (Gaiteros de Pamplona, 1976, 178). Esto puede ser debido, según los Gaiteros de Pamplona (Ibidem) a que
los instrumentos modernos, nos referimos a las gaitas, son más ágiles y manejables que los antiguos. A pesar de esta relativa mejora del material sonoro a lo largo del desarrollo musical se presentan dificultades de ejecución. Nos imaginamos que antiguamente la ejecución sería por tanto menos viva (Gaiteros de Pamplona, 1976, 178)
AURKEZPENA
El Baile de la Era es una suite de danzas. Estas reciben diversos nombres y son bailadas una detrás de otra en el mismo baile, como si de una sola danza se tratara. Las danzas reciben estos nombres:
Pasacalles
Cadena
Fandango
Vals
Jota Vieja
irakurri gehiago
Al igual que otras manifestaciones coreográficas, el Baile de la Era tiene una historia de pérdida y recuperación. No sabemos con exactitud en qué consistía el Baile de la Era con anterioridad a 1903, aunque la composición de lo presentado en esta fecha puede ser una estilización de las danzas en boga en la época, en los lugares donde se celebraban los bailes: las eras.
Los orígenes de la versión actual del Baile de la Era se encuentran en la danza bailada con...irakurri gehiago
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El Baile de la Era se baila con “ropa de calle”, esto es, con ninguna especial. Dado que el tiempo más habitual en el que es bailado son las fiestas patronales o populares, es el traje de fiestas el más frecuente. Allá donde el traje de fiestas es blanco, este será el utilizado.
Por otro lado, los grupos de danza estelleses han utilizado con el tiempo diversas indumentarias. Si bien en la primera fotografía de 1903 no se aprecia una vestimenta especial, sí que son a...irakurri gehiago
Tal y como se ha comentado más arriba, las primeras transcripciones desde la tradición oral a la escrita proceden de Demetrio Romano, que las recoge de su padre, el reconocido gaitero Julián Romano. Más adelante, con motivo de los Juegos Florales y Certamen celebrados por acuerdo del ayuntamiento pamplonés en 1928, se constituyó un premio de 250 pesetas para el Certamen de Música:
Colección de piezas bailables para chistu y gaita, que armonicen con los bailes llamados de la era, inguruchu, etc. (Doñabeitia, 2017)
Los gaiteros Elizaga se presentaron al certamen con su partitura del Baile de la Era y fueron premiados. El año siguiente, 1929, es el P. Hilario Olazaran quien lleva a partitura para piano el Baile. Los hermanos Elizaga serán los sucesores de los Romano y, a partir de 1947, los Montero y los Pérez de Lazarraga fueron los contratados por el ayuntamiento estellés.
Respecto a la música del Baile de la Era, los Gaiteros de Pamplona (1976) establecen la existencia de tres versiones para ese año: la presentada por Elizaga al certamen de 1928, la versión perdida de Julián Romano y la que interpreta el grupo Larraitza. Pero puntualizan que esa versión perdida de Romano es, seguramente, la que recoge Olazaran en su publicación, pues él mismo comenta:
para esta publicación me he servido de dos versiones, que concuerdan casi en absoluto y se completan mutuamente. La que me prestó generosamente la señora viuda de Julián Romano, y la que los hermanos Elizaga presentaron al concurso de música popular navarra y que fue premiada por el Ayuntamiento de Pamplona, en 1927.
Son melodías de gaita, que sin cambiar una nota, salvo las pequeñas adiciones que a modo de ritmo de tambor pongo antes de cada número… (Olazaran, 1929)
Olazaran hace dos acotaciones más que llevan a esa conclusión:
El número 4 es un vals, cuya relativa modernidad no se puede poner en duda. No consta en la versión de los Elizaga; sí, en la de J. Romano (Olazaran,1929)
La melodía que publico [de la última danza] es de J. Romano; los Elizaga ponían otra más universalmente conocida (Ibídem)
Los Gaiteros de Pamplona entienden que las partituras de Elizaga y Olazaran-Romano no contienen «contradicción alguna» (Gaiteros de Pamplona, 1976, p. 175) pese a las variaciones y se decantan por publicar la partitura de la música que en ese momento se baila en Estella, la de Elizaga. En dicha versión «se han suprimido buena parte de las repeticiones», que los dantzaris ya no ejecutan.
La velocidad en la ejecución de las melodías también ha variado. Ahora se tocan más rápido que antiguamente (Gaiteros de Pamplona, 1976, 178). Esto puede ser debido, según los Gaiteros de Pamplona (Ibidem) a que
los instrumentos modernos, nos referimos a las gaitas, son más ágiles y manejables que los antiguos. A pesar de esta relativa mejora del material sonoro a lo largo del desarrollo musical se presentan dificultades de ejecución. Nos imaginamos que antiguamente la ejecución sería por tanto menos viva (Gaiteros de Pamplona, 1976, 178)
ARANBURU URTASUN, Mikel. “Francisco Beruete y las danzas de Estella-Lizarra”. En: Revista Dantzariak, Núm. 59. Euskal Dantzarien Biltzarra. Bilbo, 2014; pp. 70-83
DOÑABEITIA CARDIEL, J.C. (2017): La danza en Estella: Francisco Beruete. Estudio del corpus de danzas creado para el Grupo Folklórico Municipal de Estella durante la década de 1950. Pamplona: Gobierno de Navarra, Ayuntamiento de Estella-Lizarra
GAITEROS DE PAMPLONA Y BERUETE, F. ...irakurri gehiago