Es una danza juego que ya no se baila.
El único testimonio que tenemos se lo debemos a los miembros de Ortzadar Joseba Ozkoidi y Maria Martínez:
En Mezkiritz, Orondritz y Aintzioa recuerdan que los casados bailaban «Ia sequía», danza festiva mixta que interpretaban en corro cogidos de las manos. Uno de los participantes se quedaba en el centro con una escoba para pegar a todo aquel que no se agachase en el momento que marcaba la música. La melodía era indeterminada y podía servir cualquiera, aunque en Orondritz recordaban la conocida murga —pasacalles— «Iruñatarra» [(Martínez & Ozkoidi, 1991, 58).
«Iruñatarra» es una composición de 1918 realizada por Celestino Pozueta Galarza y que tuvo éxito ya en los sanfermines de 1923. La composición la dedicó ese mismo año la Sociedad “La Sequía” de Pamplona. La melodía fue tocada por dicha Sociedad y bailada con la coreografía descrita, que hoy en día se mantiene. Es posible que el extraño nombre que recibe en Erro proceda del nombre de dicha sociedad.