Tras bailar el Ttun-ttun de Izaba, los dantzaris abandonan la plaza por los arkupes de ayuntamiento. Mientras se preparan para salir desde dicho lugar, los txistularis ejecutan la melodía de la Soka dantza de Uztarroze. Una vez termina la melodía, las parejas van saliendo una a una unidas por pañuelos. El Ttun-ttun de Uztarroze se baila íntegramente unidos por pañuelos. Con esa primera parte de la danza bailan girando alrededor de la plaza hasta formar un círculo en el centro de la misma. Fin...leer más
Tras bailar el Ttun-ttun de Izaba, los dantzaris abandonan la plaza por los arkupes de ayuntamiento. Mientras se preparan para salir desde dicho lugar, los txistularis ejecutan la melodía de la Soka dantza de Uztarroze. Una vez termina la melodía, las parejas van saliendo una a una unidas por pañuelos. El Ttun-ttun de Uztarroze se baila íntegramente unidos por pañuelos. Con esa primera parte de la danza bailan girando alrededor de la plaza hasta formar un círculo en el centro de la misma. Finalizada la segunda coreografía del Ttun-ttun, se baila nuevamente la primera melodía, con la que circunvolucionan por la plaza, para abandonarla por el mismo lugar por el que accedieron a ella.
El Ttun-ttun es una danza que se realizaba en todos los pueblos del valle de Roncal y que, tras dejar de bailarse varios años, comenzó su proceso de recuperación en la quinta década del siglo veinte. Sus últimos dantzaris se encontraban en Izaba, Uztarroze y Bidankoze (Otermin, 1979, 451). El último Ttun-ttun que se perdió fue el de Uztarroze y esto ocurrió antes de 1920 (Otermin, 1979, 451). Una de las causas probables de su desaparición fue la introducción de las orquestinas:
El Ttun-ttun es una danza que se realizaba en todos los pueblos del valle de Roncal y que, tras dejar de bailarse varios años, comenzó su proceso de recuperación en la quinta década del siglo veinte. Sus últimos dantzaris se encontraban en Izaba, Uztarroze y Bidankoze (Otermin, 1979, 451). El último Ttun-ttun que se perdió fue el de Uztarroze y esto ocurrió antes de 1920 (Otermin, 1979, 451). Una de las causas probables de su desaparición fue la introducción de las orquestinas:
En Uztárroz sin ir más lejos, un vecino nos comentaba que junto con otros mozos se cansó de bailar «aquello» y dejaron de hacerlo, pues preferían la música de orquestinas (Otermin, 1979, 451).
El proceso de recuperación del Ttun-ttun parece que se inició en tiempos de la II República (1931-1939) (Hualde, 2011, 42). Hualde no da más información al respecto, pero sabemos por Maxi Aramburu, que:
Dn. Teodoro que tiene gran empeño en que aprendamos bien el baile de Ustarroz. Nos enseña un rato y cuando ve que ya hemos cogido la idea del baile, se queda contento, pues él, que siempre ha tenido mucha afición a bailarlo quisiera que no se perdiese (Aramburu, 1942).
Es posible que Teodoro Marco, tras la pérdida de la que hablan los testimonios recogidos por Otermin, intentara recuperar ese Ttun-ttun que se pierde en los años 20. Sin embargo, la documentación de Maxi Aramburu nos obliga a preguntarnos por la veracidad de la afirmación. Quizá el testimonio dado a Otermin peque de androcentrismo. Maxi Aramburu acude con diversos miembros del recién creado grupo de danzas Oberena, perteneciente a Acción Católica a Uztarroze. Unos días antes de la excursión aprenden el Ttun-ttun de Uztarroze en Pamplona:
Nosotros lo habíamos aprendido el día de la Ascensión en la Diocesana, de las srtas de Marco (Aramburu, 1942)
Durante su estancia en Uztarroze lo bailan en repetidas ocasiones. En ellas participan, primeramente, chicas jóvenes y, posteriormente, hombres y mujeres ya casadas. Se aprovecha el momento para afianzar lo aprendido en Pamplona:
Acabada nuestra exhibición salen 7 chicas ataviadas con el señorial traje roncalés y con las que empezamos a bailar el chun-chun… Se bailó el chun-chun, lo mejor que se pudo...De vez en cuando se bailaba el chun-chun y ya se iba animando algún mayor a salir a bailarlo, mientras los que no se decidían a salir iban dándonos consejos sobre la forma de bailarlo...(Aramburu, 1942)
La participación de “chicas” bailando el Ttun-ttun lleva a pensar que en el año 1942 se mantenía la danza, siquiera entre las mujeres. Eso parecen reflejar las palabras de Gaizka de Barandiaran:
Erronkarin egoten nintzen askotan. Hango berri banekien. Halako batean izan nuen Uztarrozeko dantzaren berri eta joan nintzen hara. Galdetu nuen, hango neskatxek uste dut dantza egiten zutela orduan, eta bati hartu nion Uztarrozeko dantza hori. Musika hango beste bati hartu nion [Estuve varias veces en Roncal. Tenía noticas de allí. Un día tuve noticias de la danza de Uztarroze y fui allá. Pregunté, creo que las chicas lo bailaban entonces, y aprendí de una de ellas esa danza de Uztarroze. La música se la tomé a otra] (Araolaza, 2006).
El grupo Oberena lo incorpora a su repertorio junto al ttun-ttun de Izaba. En 1943, el Diario de Navarra se hace eco de la participación de dantzaris roncaleses en Javier:
[Éxito de Oberena] así como del grupo de roncaleses (DN, 09/03/1943, p. 4)
No sabemos si se refiere a izabarras o a uztarroztarras.
Gaizka de Barandiaran permaneció en Xabier-Javier entre 1941 y 1944 y fue seguramente en esa ocasión de 1943 cuando tuvo noticia del Ttun ttun de Uztarroze. Fue entonces cuando entabló contacto con Maxi Aranburu, del grupo Oberena de Iruña:
Goiz batean, hotz handia zegoen, ni jaitsi nintzen eta banekien han dantza talde bat etorri zela, ez nekien zein dantza-talde. Pilotaleku ondoan, bazter batean hasi ziren dantza egiten. Hor nagusia Maxi Aranburu zan [Una mañana, hacía mucho frío, bajé y sabía que había venido un grupo de danzas, no sabía qué grupo de danzas. Junto al frontón, comenzaron a bailar en un rincón. El jefe era Maxi Aranburu (Araolaza, 2006).
Sin embargo, no será hasta 1956 que Barandiaran publique su trabajo sobre el Ttun-ttun de Uztarroze (Barandiaran, 1956). A finales de la década siguiente, el grupo de danzas Argia, de Donostia, investiga nuevamente en el valle y lleva al escenario, en 1971, el ttun-ttun de Uztarroz unido al de Izaba (Dantzan.eus, 2010). El unir los dos ttun-ttunes en uno parece proceder de la recuperación realizada por Maxi Aramburu para el grupo de danzas Oberena, de Iruña. De hecho, tanto Argia, como Rocamador (grupo de Sangüesa que también investiga sobre los ttun-ttunes en 1971) acuden a Aramburu para pedir consejo:
Maxi lo aprendió de Uztarroz. Pero bailaban las dos versiones: Isaba y Uztarroz, los dos ttun-ttunes, porque los bailaban juntos (Entrevista a Juan Pedro Aramendia, 19/08/2021)
En 1979 Marisol Otermin (1979) recogió en un trabajo de investigación las descripciones de los Ttun-ttunes de Izaba y Uztarroze, investigados el año anterior a la publicación.
Por todo ello, la recuperación del Ttun-ttun de Uztarroze sigue la del de Izaba, aunque no se llegue a bailar en este pueblo. De hecho, en el proceso de recuperación del Ttun-ttun en diversos pueblos del valle entre 2003 y 2005, Uztarroze lo lleva a la plaza en 2004 con motivo de la celebración del Uskararen Eguna en dicha localidad. No se volverá a repetir (Hualde, 2011, 44). Sin embargo, ese Ttun-ttun aprendido por Maxi Aramburu y que visualizaría y describiría Gaizka de Barandiaran, que sería investigado nuevamente por el grupo de danzas Argia, de Donostia, con indicaciones de Aramburu; y aprendido en Oberena por algunos miembros fundadores de Ortzadar; ese Ttun-ttun es el que sirve para recuperar esta danza en pueblos que la habían perdido y de cuya versión no se tienen noticias: Garde (de la mano de J.M. Mendiola, ex-dantzari de Argia) y Erronkari (de la de A. Iribarren, ex-dantzari de Ortzadar).
Son varias las descripciones que tenemos del Ttun-ttun de Uztarroze: de Gaizka de Barandiaran (1956), de Marisol Otermin (1979) y de Francisco Arrarás (1983). Por otra parte, disponemos de documentación visual de lo bailado por la Sección Femenina de la Falange Española como Txum-Txum de Uztarroz del Roncal (NO-DO, 1959) o Txun-txun (NO-DO, 1963); de la presentación del Ttun-ttun por parte del grupo de danzas Argia, de Donostia (1989) y de una actuación del grupo Rocamador de Zangoza (1974), entre otras.
Estas grabaciones audiovisuales recogen el que podríamos llamar “Ttun-ttun de Roncal”, en el que van unidos el de Uztarroze y el de Izaba. Las descripciones escritas son las que nos muestran el de Uztarroze de forma separada del de Izaba.
El comienzo de la danza ya plantea diferencias en los testimonios. Según Barandiaran, la danza la comenzaban las mujeres:
Al revés que en «Ingurutxo» y «Aurresku», en el «Ttun-Ttun» primero saltaban las chicas y los chicos después (Barandiaran, 1956, 52)
No nos informa de cómo es el acceso a la plaza, ni de si existe alguna ritualidad.
En la misma línea de Barandiaran, y prácticamente parafraseándolo, se pronuncia Arrarás. Para este, ese “saltar las chicas” a la plaza es una Soka dantza:
Contrariamente a otros ingurutxos de Navarra, pero tal como acontece en todas las Soka dantzas pirenaicas, son las muchachas quienes primero salen a la plaza. Cogidas de la mano avanzan circularmente alrededor de la plaza (Arrarás, 1983, 59)
La falta de descripción de Barandiaran también la encontramos en Otermin que, sin embargo nos ofrece un modo diferente de acceder a la plaza, a la danza:
...Un mozo cualquiera, el más decidido, rompe el corro [de conversación] y con su pareja frente a él empiezan a bailar (Otermin, 1979, 461)
La descripción de la danza propiamente dicha muestra diferencias según la autoría. Es importante recordar el proceso de recuperación para relativizar estas diferencias. Hemos de tener en consideración que la información se recibe de un número limitado de informantes que nos enseñan su manera de bailar. Es más, no podemos olvidar que estamos ante recuerdos.
La descripción de Otermin, de 1979, se corresponde con lo que se baila en 2021. Por su parte, la descripción de Barandiaran (1956) y la que podemos ver en los audiovisuales de la Sección Femenina (1959), de Argia (1989), de Rocamador (1971) o de Andra Mari de Galdakao (2011), no difieren en lo esencial. En estos últimos casos tendremos en consideración que la danza se adecúa a necesidades escénicas.
La descripción de Patxi Arrarás (1983) difiere en algún punto de la de Barandiaran, aunque la sigue casi con literalidad. El caso de Patxi Arrarás es conflictivo por dos motivos: por un lado por no citar fuentes (que el resto de autores sí hacen) y por otro por tratarse de una obra póstuma adaptada por J.C. Labeaga. Sin embargo, sabemos que Arrarás manejó el documento de Barandiaran que, pese a ser publicado en 1956, se debió escribir en 1954. comentando parte del texto, Labeaga apunta:
Estas frases que he incluido pertenecen a un trabajo a máquina, firmado en Tudela, 12 de julio de 1954, por Salvador Barandiaron, S.J. con el título Roncal, riñón de Vasconia, y que estaba entre los papeles de Francisco Arrarás (Arrarás, 1983, 62)
Barandiaran trae a la publicación la que llama “partitura vieja” y otra retocada por él, a la que llama “partitura nueva”. Como ya se ha dicho en otro lugar, para Barandiaran el Ttun-ttun es un ingurutxo:
Todas las advertencias señaladas abogan por el carácter de «ingurutxo» de la danza roncalesa del Ttun-ttun de Uztárrotz (Barandiaran, 1956, 54)
Su comparación con los ingurutxos y con las mutil dantzak baztandarras le lleva a proponer unos cambios que lleva a la “partitura nueva”. El primero tiene que ver con el ritmo, que pasaría del 6/8 al ⅜:
No aparece ningún «ingurutxo» en compás de 6/8… El compás parece que debe ser el de ⅜ (Barandiaran, 1956, 54)
Además:
El número de compases… está conforme con el canon exigido por el folklore popular. Cada frase musical… consta de los ocho compases acostumbrados (Ídem)
La danza estaría dividida en dos partes definidas por el uso o no del pañuelo:
Dos partes se distinguen en la Partitura de la Danza del «Ttun-ttun» de Uztárrotz… La primera parte consiste en una danza circular de las parejas alrededor de la plaza… En la segunda parte los danzantes bailan en sus puestos sin avanzar circularmente. Las parejas se desplazan a derecha e izquierda en tres idas y vueltas… A continuación, el chico de la primera pareja saca de la cintura un pañuelo (blanco, morado, de cualquier color), la chica agarra de la otra punta y forman arco. Las demás parejas pasan por debajo del arco y repiten la Danza circular de la primera parte… Al final… sólo bate el tambor (salterio) y las parejas desfilan sin marcar el paso, aunque sí el ritmo de la Danza. Y terminada en el último compás… con una vuelta completa de los danzantes sobre sí mismos. Esa es la redacción que hasta ahora se viene aceptando, conforme a la partitura vieja (Barandiaran, 1956, 53)
En lo que a la coreografía se refiere, Barandiaran comienza añadiendo al Ttun-ttun “una llamada (Deya)” (Ídem, 55). Si bien reconoce que entre sus informantes dantzaris no consigue ningún testimonio de su existencia, la recoge de dos “etxeko-anderiak”.
Arrarás sigue a Barandiaran: Incluye una llamada (“Deia”), divide la melodía de igual manera y la transporta a un compás ⅜.
Esa primera parte es igual a la descrita para la “partitura vieja”, con alguna indicación sobre el modo de bailar:
[No hay que] avanzar con un enfrentamiento uniforme e igual [ de las parejas] cara a cara, sino a un meneo de todo el cuerpo, oscilando a derecha e izquierda, ayudándose para ello de los brazos en alto (Barandiaran, 1956, 59)
Arrarás llamará a la danza “Inguru dantza” por su movimiento de traslación alrededor de la plaza. Pero su descripción varía de la de éste:
En la repetición de la melodía B, así como en los ocho últimos compases de la frase C, las parejas de danzantes se detienen y continúan bailando, frente a frente, con desplazamientos a derecha e izquierda. Iniciada la siguiente frase musical, las parejas prosiguen su traslación danzante (Arrarás, 1983, 60)
Esta segunda parte tiene una melodía propia: es la parte de los “desplazamientos a derecha e izquierda”. Barandiarán marca cuántas han de ser las repeticiones: cuatro idas y vueltas. Barandiaran recoge en su melodía B este movimiento en el sitio, pero cambia la coreografía en los apoyos (está en 2/4). Arrarás mantiene el compás en ⅜ y da una melodía que se corresponde con la melodía A de Barandiaran.
Da la impresión de que bien Arrarás, bien Labeaga al adaptar el texto de aquel, se equivocan e incluyen la descripción coreográfica de la melodía B de Barandiaran (en el sitio y con movimientos izquierda-derecha) en la frase B de la “Inguru dantza” (cuya melodía, como hemos dicho se corresponde con la A de Barandiaran).
A partir de este punto, Barandiaran da varias opciones: se puede recomenzar desde el principio, repetir la melodía B desde la Deia o terminar en la melodía B o en una de sus repeticiones.
Como no puede ser de otra manera, la parte bailada con pañuelos Barandiaran la denomina Pañolo-dantza (Pañuelo dantza en Arrarás):
Se llama «Pañolo-dantza», porque el chico primera de la fila saca de la cintura un pañuelo de cualquier color (principalmente blanco, morado) y se lo da a la chica. Así la primera pareja forma arco con el pañuelo para describir otro ingurutxo de modo idéntico al que se ha descrito… en el comienzo del «Ttun-Ttun» (Barandiaran, 1956, 64)
El compás es aquí 2/4 y apunta: “muy movido” (este mismo apunte aparece en Arrarás, que también divide la partitura en las mismas frases que Barandiaran).
En su descripción no dice que bajo ese arco formado por la primera pareja pasen las demás. Diera la impresión de que es opcional, pues más adelante apunta:
[La] Pañolo-Dantza presenta esta Variante en la descripción del Ingurutxo y consiste en que: al iniciarse [la] Pañolo-Dantza la primera pareja de cabeza forma arco con el pañuelo. Las chicas de la fila de fuera pasan por debajo del así formado y naturalmente pasan bailando. Los chicos de la fila de dentro quedan quietos sin avanzar en sus puestas. Las chicas de la fila de afuera, una vez que atraviesan el arco, siguen avanzando circularmente, describiendo el Ingurutxo, de la misma forma que al comienzo del «Ttun-Ttun». Pero describen el círculo rodeando a los chicos y vuelven a emparejarse cada una con cada chico (Barandiaran, 1956, 65)
Arrarás hace pasar a las parejas por debajo de ese arco o puente formado por la primera pareja:
La primera de estas [parejas] levanta los brazos unidos por el pañuelo y las restantes pasan por debajo del arco formado, para iniciar… una nueva traslación con las manos enlazadas por el pañuelo extendido por encima de las cabezas (Arrarás, 1983, 60)
El Ttun ttun terminaría, para ambos autores, con una vuelta final de los dantzaris sobre sí mismos, seguida de un redoble de tambor, o un toque contínuo de salterio. Aquí terminaría la danza o se volvería a comenzar desde el principio para Barandiaran. Arrarás plantea otra situación:
Durante este batir del salterio o thun thun, la pareja que marcha en cabeza se detienen, y alzando sus brazos, unidos por el pañuelo, pasan las demás bajo el arco así formado, de esta manera han vuelto todas las parejas a su posición primitiva. Ajuicio del txistulari se puede recomenzar el pañuelo dantza repitiéndolo desde la frase musical B (Arrarás, 1983, 61)
En la descripción que ofrece Marisol Otermin no se realizan puentes en el Ttun-ttun de Uztarroze
El número de participantes no está fijado. La participación es libre, pero cuando se baila en Isaba se ha de hacer con el traje tradicional. Suelen ser dantzaris de Kurruskla Kultur Elkartea.
Patrimonio relacionado:
Los trajes tradicionales
MULTIMEDIA
Ttun-ttun de Uztarroze-Uztárroz. Isaba, 2019. F.: Marisol Otermin
Tanto hombres como mujeres visten el traje tradicional roncalés para bailar el Ttun-ttun. En el caso de ellas, el traje elegido es el de mujer soltera. Consta de zapatos negros, medias blancas, blusa blanca, dos faldas azules y un justillo adornado en la pechera. Las faldas son dos y son largas, dejando ver los zapatos. La sobrefalda, aunque es de color azul por la parte de fuera, va levantada por delante, dejando ver la parte interior, que es de color rojo en su parte inferior. Est...leer más
Tanto hombres como mujeres visten el traje tradicional roncalés para bailar el Ttun-ttun. En el caso de ellas, el traje elegido es el de mujer soltera. Consta de zapatos negros, medias blancas, blusa blanca, dos faldas azules y un justillo adornado en la pechera. Las faldas son dos y son largas, dejando ver los zapatos. La sobrefalda, aunque es de color azul por la parte de fuera, va levantada por delante, dejando ver la parte interior, que es de color rojo en su parte inferior. Esta sobrefalda se sujeta en esa posición mediante un broche que la sujeta en la parte posterior y que se llama amabitxi. El justillo destaca por el bordado que asciende por la parte delantera, a ambos lados de los corchetes.
Para bailar el Ttun-ttun los chicos visten, principalmente, el traje de soltero: zapatos negros, medias blancas, calzón negro, zaragüelles blancos, faja morada, camisa blanca y chaleco. El elastiko, o chaqueta de paño, no se utiliza para bailar. El chaleco no va uniformado. Su parte delantera es colorida o negra. El chaleco negro era distintivo de los hombres casados.
Además de estos elementos, colgando del cuello hacia la espalda, visten un sombrero negro. En la cabeza, antiguamente llevaban un pañuelo (zorongo)
Para información más detallada sobre la indumentaria roncalesa, ver Otermin (1979, 442-451) y Hualde (2019).
PRESENTACIÓN
Tras bailar el Ttun-ttun de Izaba, los dantzaris abandonan la plaza por los arkupes de ayuntamiento. Mientras se preparan para salir desde dicho lugar, los txistularis ejecutan la melodía de la Soka dantza de Uztarroze. Una vez termina la melodía, las parejas van saliendo una a una unidas por pañuelos. El Ttun-ttun de Uztarroze se baila íntegramente unidos por pañuelos. Con esa primera parte de la danza bailan girando alrededor de la plaza hasta formar un círculo en el centro de la misma. Fin...leer más
El Ttun-ttun es una danza que se realizaba en todos los pueblos del valle de Roncal y que, tras dejar de bailarse varios años, comenzó su proceso de recuperación en la quinta década del siglo veinte. Sus últimos dantzaris se encontraban en Izaba, Uztarroze y Bidankoze (Otermin, 1979, 451). El último Ttun-ttun que se perdió fue el de Uztarroze y esto ocurrió antes de 1920 (Otermin, 1979, 451). Una de las causas probables de su desaparición fue la introducción de las orquestinas:
...leer másEl número de participantes no está fijado. La participación es libre, pero cuando se baila en Isaba se ha de hacer con el traje tradicional. Suelen ser dantzaris de Kurruskla Kultur Elkartea.
Los trajes tradicionales
MULTIMEDIA
Tanto hombres como mujeres visten el traje tradicional roncalés para bailar el Ttun-ttun. En el caso de ellas, el traje elegido es el de mujer soltera. Consta de zapatos negros, medias blancas, blusa blanca, dos faldas azules y un justillo adornado en la pechera. Las faldas son dos y son largas, dejando ver los zapatos. La sobrefalda, aunque es de color azul por la parte de fuera, va levantada por delante, dejando ver la parte interior, que es de color rojo en su parte inferior. Est...leer más
Aramburu, Maxi (1942): Memoria folklórica. Manuscrito inédito.
Aranburu, Mikel (2021): Ttun-ttun. En Auñamendi Eusko Entziklopedia. https://aunamendi.eusko-ikaskuntza.eus/en/ttun-ttun/ar-132379/
Araolaza, Oier (2011): Erronkariko ttun-ttunaren historia osatzen. Dantzan.eus. Jasota: 2011/06/16....leer más
Lo enseña la Asociación Cultural Kurruskla